2011-07-10

LAS PINTAS

2011-07-10 LAS PINTAS 1987 METROS

Si sopla el viento del norte en Asturies, y hay un poco de orbayu, y tienes ganas de subir al monte, y ni siquiera los ves, lo mejor es cruzar la barrera del tiempo por la cordillera Cantábrica y probar a ver si hay suerte en el sur.
Hoy ha habido suerte y nada más pasar el Puerto de San Glorio ya se veían todas las cimas de los montes leoneses.
Pronto aparecen los Montes de Riaño y entre ellos uno que tenía la etiqueta de WANTED, ese era Las Pintas.

Riaño
Nos acercamos hasta el pueblo Las Salas por debajo de la presa del pantano y comenzamos a prepararnos para la ascensión, una simpática lugareña se nos acercó y nos preguntó si íbamos a Las Pintas, tras la respuesta afirmativa nos relató la ruta que deberíamos seguir. Le hicimos caso y atravesando el pueblo nos dirigimos en dirección norte por El Vallejo.


Inicio en Las Salas
Dejando a parte la pista que lleva a Salamón comenzamos el ascenso por los antiguos campos de cultivo hoy en día abandonados y a la vera del arroyo pasamos junto a unos cerezos con sus cerezas a punto de madurar.
Oscar sabe hacer fotos
La hierba alta y un poco seca se encarga de molestar un poco, pero no lo suficiente como para no seguir avanzando, la pendiente se va acentuando y sin camino definido llegamos hasta la majada de las Traviesas.


Un poco de maleza en el camino
Por encima de la majada nos enfrentamos a la pared rocosa, los jitos y unas marcas amarillas nos van dirigiendo hacia una canal inclinada que nos facilita el paso al siguiente escalón de la peña. El Esla libre ya de la presa se desliza entre las montañas en busca de las llanuras leonesas.


Desde la majada comienzan los jitos
Continuamos entre rocas, unas veces resaltes, otras, pequeñas chimeneas; el frescor del día sin embargo de primera hora va dejando paso al bochorno del mediodía, hemos empezado tarde y eso se paga irremediablemente.  
El pantano ya queda abajo
Parece que no acaban nunca las rocas, un pequeño laberinto en las zonas más altas hace que se retarde más la llega a la cresta previa a la cima.


Comienzan las complicaciones, pero pequeñas.
Aunque tiene su compensación tanto esfuerzo, desde la cresta se ven todas las colas del pantano se mete entre todas las montañas. Al norte queda el Gilbo con sus 1677 metros se nos ha hecho pequeño.


El pantano y la cordillera desde la cresta
Un poco al noroeste el Yordas ya es otra cosa sus 1967 metros se hacen notar, y mientras lo contemplamos nos acercamos a nuestro objetivo casi sin darnos cuenta.


En primer plano el Yordas
Oscar que quería quedarse en el collado continúa tras animarle, es imperdonable no conseguir la cima teniéndola tan cerca. 


Oscar en la cresta cimera
Superado un tramo un poco aéreo pero sin dificultad llegamos hasta los 1985 metros de Las Pintas, Oscar un poco descojonado no quiere aparecer en la foto y se esconde detrás del vértice geodésico,
 

En Las Pintas 1985 metros
Repuestas las fuerzas nos lanzamos en busca de la cima oriental, un poco más baja pero con vistas tal vez más amplias que la principal. Al frente se nos alinean el Gilbo, y el Espigüete, ya en tierras palentinas.


En busca de la cima oriental

 Unos hierros que simulan una cruz coronan esta cima, a donde llegamos para poner fin fin al esfuerzo y comenzar el descenso al punto de partida.


En la cima Oriental
Las nubes que nos acompañado durante toda la jornada no nos abandonan,
no obstante no logran cubrir las cimas de los alrededores y nos permiten distinguir incluso las cimas del Mampodre por encima de Maraña.


Ortzamendiren Sua en Las Pintas oriental
Buen recorrido al monte más alto de Riaño, un desnivel de 1300 metros con poco desplazamiento, lo que hace que el horario no pase de las seis horas. 
Y para terminar un gran baño en el pantano para dejar un buen sabor de boca final, como los buenos vinos. 



Las Pintas
 


2 comentarios:

  1. Que pena eses cotes tan cercanes a los dosmil y que nun lleguen eh!!!

    Son una pasada esos picos de Riañu.

    Un abrazu a los dos

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  2. La verdad que es lo mismo si llegan o no, pues levantan lo suficiente (prominencia)que merecen mucho.
    Ayer en El Susaron otro día bueno.
    Un abrazu collaciu.

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